Bomba tras bomba en el Efesé

Lo que tenía que ser un partido en el Municipal Cartagonova para festejar los play-off y dar por finiquitada la fase regular de la Liga se convirtió en un domingo amargo, un domingo en el que el protagonista fue Paco Gómez con su cese a Pacheta. La victoria contra el Cacereño (2-0) se quedó en una simple anécdota.

Se armó el revuelo en toda la ciudad portuaria. Las redes sociales echaban humo y nadie entendía la decisión tomada. Pacheta, el que había logrado que el Efesé consiguiera acabar segundo tras algunos meses de vacas flacas en el vestuario y malos resultados, era destituido de la manera más rastrera posible ya que la decisión del presidente dependía de lo que pasara en otro estadio, en La Victoria, donde se jugaba el Jaén - San Fernando. Increíble.

Último partido de Pacheta en el Cartagonova ante Cacereño. Abraza a Álvaro García.

Enseguida se empezó a barajar la opción de José Miguel Campos como sustituto de Pato. Y así se ha confirmado. Hombre conocedor del fútbol de la Región de Murcia que llega con Manolo Requena como segundo. Pero no todo se acababa ahí. Con míster debajo del brazo había que saber con quien se tenía que enfrentar el equipo el próximo fin de semana.

Al día siguiente se celebraba en Las Rozas el sorteo de emparejamientos que nos daría el primer rival a batir. Cauda de Mieres (Asturias) ha tenido la mala suerte de enfrentarse a los blanquinegros. Jugadores que estarán unidos por la gran labor que ha ido cosechando Pato pero unos jugadores desconcertados y alarmados ante las locuras y bombas de un Club en el que no hay día que no ocurra algo.

A quien se le diga que un equipo que ha acabado segundo del Grupo IV ha utilizado 3 entrenadores no se lo cree y tacha de loco a cualquiera. Pues sí. No es locura, es afán de protagonismo y afán de recaudación pero si no se consigue, que deseo y espero que sí, el ascenso si que no va a recaudar ni un duro como dijo hace unos meses.

Ahora lo que se debemos hacer todos los efesistas es estar juntos, apoyar a cada uno de los jugadores, darles fuerzas, confiar en que podemos conseguirlo aunque sean seis partidos y no abandonar el barco aunque no estemos de acuerdo con las decisiones de PG. ¡Volveremos!