La mañana comenzaba muy
temprano para los cerca de cuarenta aficionados que se desplazaban en autobús
desde Cartagena. Cuando apenas deslumbraban los primeros rayos del Sol, largas
colas se amontonaban ya en el Cartagonova para conseguir esa codiciada entrada
para el enfrentamiento de Copa frente al Barcelona en dieciseisavos de final. En
la capital de España amanecía un día soleado pero fresquito. Dos palabras. Un
solo sentimiento. ¡Vamos, Efesé!
![]() |
| Celebración de los jugadores ante el gol de Fernando. Por Andy Céspedes para SportCartagena |
Con ese grito y un
subidón de adrenalina, las puertas del Estadio Municipal Pedro Escartín de
Guadalajara se abrieron a las seis y media. Ya no éramos cuarenta, sino un
centenar de seguidores blanquinegros ataviados con bufandas y banderas. El
presidente Fran De Paula junto a la gerente Cristina Bustillo se acercaron a la
grada a saludar y dar ánimos. La ocasión lo merecía. De Leganés animando al ‘puma’
De Lerma, de diferentes puntos de Madrid o de Guadalajara, los cánticos no
cesaron ni un solo minuto. Aún situándonos en las butacas, en los primeros
segundos, el equipo entrenado por Luís García Tevenet ya perdía en el marcador
por un error de la defensa. Viejos fantasmas de jornadas anteriores volvían a
cada uno de nosotros.
El equipo lo intentaba
por las bandas, con jugadas a la contra, Limones paraba claras ocasiones de gol
y el medio campo sufría. Destacar que una mitad del césped, donde el Cartagena
defendía, fue regado con gran intensidad antes del comienzo provocando
resbalones y pérdidas de balones. No había manera de llegar a la portería de
Álvaro Campos.
Pero Antoñito, Carlos
David y Megías, un tridente de oro, tras una magnífica jugada, le pusieron a Fernando
un pase interior que el pileño no perdonó poniendo el empate en el marcador.
Así se llegó al descanso. Los cuarenta y cinco minutos restantes fueron toda
una lucha y agitación por parte de los blanquinegros. Cualquier ocasión era
aplaudida, nada se podía desperdiciar. Diferentes actuaciones del árbitro eran
increpadas por los aficionados y aclamadas en el cielo. El partido se dominaba
pero no conseguíamos pasar del empate. Fernando caía al terreno de juego y con
ello una lesión de rodilla que le impidió continuar siendo sustituido por De
Lerma.
El colegiado pitaba el final
del encuentro. No pudo ser. Pero al término, cuando aún los jugadores del
Cartagena se acercaron a saludar a todos y cada uno de los que allí estábamos, un
aficionado del Guadalajara dijo: “estad orgullosos, tenéis equipo”. Pues eso. A
seguir así y un puntito más en casa de un rival directo y en un campo muy
difícil.
.bmp)
No hay comentarios:
Publicar un comentario